La energía solar fotovoltaica atraviesa uno de sus momentos más dulces en España. La escasez de lluvias y las numerosas horas de sol durante el año, además de la elevada inflación, han llevado a millones de hogares y empresas a apostar por la energía solar fotovoltaica como aliado para encontrar un gran ahorro económico y energético. No obstante, su distribución por territorios no es homogénea.

De este modo, tomando como referencia el último informe anual publicado por la UNEF en 2023, refleja que 2022 fue un año excepcional para la energía solar, con la instalación de 4.701 MW solo en plantas en suelo (un 25-30% más que en 2021), aunque concentrado especialmente en tres regiones. Lo que demuestra que queda aún un largo camino por recorrer para alcanzar la plena extensión homogénea de esta fuente de energía renovable.

Las cifras aumentan si se tienen en cuenta los datos de autoconsumo, que se alcanzaron los 2.507 MW, es decir, el 108%, gracias al poder de la industria. De ahí que la energía solar fotovoltaica gane peso y ofrezca trabajo a más de 197.300 personas (empleos directos, indirectos e inducidos).

España puede presumir de contar con una posición geográfica estratégica y preferente, disfrutando de más de 300 días de sol al año. No obstante, hay comunidades autónomas en las que las instalaciones solares fotovoltaicas aumentan debido a que están más expuestas al sol, convirtiéndose en una inversión aún más óptima y rentable. De hecho, el 10% de la producción energética nacional es energía solar fotovoltaica.

Un reparto desigual por autonomías

La energía solar fotovoltaica está muy presente en las comunidades autónomas de España, aunque de forma desigual. De hecho, tres de ellas suman 3.778 MW, lo que representa el 80% de la nueva potencia anotada en el territorio nacional, siendo las encargadas de liderar el despliegue de parques solares.

Sin duda, destacan: Castilla-La Mancha (con más de 1.125 MW), Andalucía (con más de 1.186 MW) y Extremadura (que lidera el ranking con más de 1.450 MW). La extremeña fue la comunidad autónoma líder en el desarrollo fotovoltaico con 1.467 MW, o lo que es lo mismo, el 31% de la potencia instalada a nivel nacional.

La comunidad extremeña produce una media energética de 10.083.536Mwh, Andalucía se sitúa en los 9.514.091Mwh y Castilla-La Mancha en los 8.167.174Mwh. La cuarta de la lista en aportación en energía solar fotovoltaica para el conjunto español es la Región de Murcia, con 2.016.193Mwh.

El liderazgo extremeño como comunidad autónoma que más apuesta por la energía solar se hace presente también si se analiza la potencia acumulada en plantas en suelo, incluido el autoconsumo imputado por la Red Eléctrica Española. Aquí encabeza nuevamente la lista con 5.348 MW

La cara opuesta de la moneda, en cuanto al reparto de las instalaciones solares fotovoltaicas en las comunidades autónomas de España la presentan Galicia, Madrid,  País Vasco, Asturias, Cantabria y Baleares, en las que el registro de nueva potencia fue muy limitado o prácticamente inexistente.

Previsiones a medio-largo plazo

En julio de 2023, la UNEF aseguró que los datos que se espera que se extraigan con respecto a 2023 serán muy positivos. De hecho, se revisarán al alza los objetivos de implantación de energía solar en España para 2030, superando la barrera de los 36 GW recogidos en el borrador del Plan PNIEC de 2021 a 76 GW, tanto para autoconsumo como para las plantas de suelo.

Por tanto, el nuevo indicador, con respecto a lo que proponía la UNEF, se situará entre 70 y 80 GW, de los cuales 57 GW se corresponden a proyectos de energía solar fotovoltaica en suelo.

Provincias españolas con mayor radiación solar

Andalucía es de las regiones del mapa de España que más horas de sol recibe durante los 365 días del año, lo cual incita a que se instalen sistemas de energía solar fotovoltaica. Aquí encontramos a Sevilla y Huelva, aunque no son las que más energía producen, pues son las ciudades extremeñas de Cáceres y Badajoz las que lideran el ranking debido a su extensión territorial.

En la cara opuesta del mapa encontramos a la ciudad de Bilbao, con apenas 1.694 horas de sol al año. Todo ello provoca que la potencia fotovoltaica acumulada en plantas de suelo (incluido autoconsumo imputado por REE) sea de 4 MW en el País Vasco.

La problemática de los días nublados

En el centro del ranking se sitúan comunidades como la Comunidad Valenciana con (423 MW), Cataluña (296 MW) y Navarra (167 MW). Buena posición también toma Castilla y León, con 1.436 MW. En estos puntos, en el caso de haber días nublados, las instalaciones de energía solar fotovoltaica funcionan con plena productividad.

Y es que las células fotovoltaicas tienen la capacidad de captar tanto de forma directa como indirecta la luz solar. De ahí que los paneles puedan producir entre un 10% y un 25% de su capacidad máxima en los días nublados, dependiendo también de la tecnología, así como del nivel de densidad de las nubes que podría opacar la radiación solar.

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